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Banco Azteca lidera programas de educación financiera

La educación financiera es uno de los grandes retos en México. Más del 60% de los adultos, de acuerdo con la CONDUSEF, no comprende conceptos básicos relacionados con el ahorro, los intereses o la prevención de fraudes. Esta carencia limita la capacidad de las personas para planear, invertir y protegerse en un entorno económico cada vez más complejo.

En 2025, Banco Azteca se consolidó como líder en inclusión y educación financiera, al recibir nuevamente el reconocimiento de Capital Finance International (CFI.co) como “Campeón en Educación e Inclusión Financiera en México”.

El impacto del programa Aprende y Crece

El programa insignia de Banco Azteca, “Aprende y Crece”, benefició en 2024 a más de 1.68 millones de personas en todo el país mediante cursos en línea, talleres presenciales, seminarios web y campañas multimedia. Su enfoque no solo busca generar cultura financiera, sino también llegar a los grupos más vulnerables: mujeres, jóvenes y adultos mayores.

Este modelo ha demostrado que la verdadera inclusión requiere acompañamiento. No basta con abrir una cuenta bancaria; es fundamental que los usuarios comprendan cómo usarla, cuáles son sus riesgos y qué beneficios pueden aprovechar.

Educación financiera contra la vulnerabilidad económica

El entorno económico en México enfrenta retos como la inflación, el endeudamiento informal y el crecimiento de fraudes digitales, que aumentaron un 52% entre 2020 y 2024 según la ABM. Ante este panorama, enseñar a reconocer riesgos y a proteger datos personales se ha convertido en una necesidad social.

La educación financiera dota a las personas de herramientas para proteger su patrimonio, evitar deudas impagables y mejorar su estabilidad económica.

Banco Azteca y la nueva visión de inclusión

Con más de 23 millones de clientes y dos mil sucursales, Banco Azteca ha logrado escalar un modelo que combina lo digital con la presencia física, crucial en zonas marginadas. Esta estrategia refuerza los esfuerzos públicos y demuestra que la banca puede ser un aliado en la construcción de una sociedad más informada y equitativa.

El reconocimiento internacional no solo valida la operación financiera del banco, sino también su capacidad de educar y transformar. Hoy, la educación financiera es un pilar indispensable para avanzar hacia una verdadera inclusión económica en México.