con imágenes tomadas de la red
El cineasta celayense Carlos Hernández vuelve a destacarse en el cine mexicano con su nuevo cortometraje «Charrascas».
Esta nueva producción lo llevará a competir por el prestigioso premio Ariel.
Tras obtener una nominación en 2023 con su cortometraje «El Grillo», Carlos ahora busca repetir el éxito con esta obra que explora la vida dentro de un penal a través de las cicatrices que los reclusos se hacen como símbolo de pertenencia.
Para sorpresa de muchos, «Charrascas» se filmó en tan solo cuatro días.
Durante estos días el director y su equipo lograron capturar testimonios auténticos y conmovedores de los reclusos.
Este corto profundiza en cómo estos hombres han logrado convertir sus experiencias traumáticas en oportunidades para la reflexión y la rehabilitación, utilizando el deporte como herramienta de cambio.
Carlos Hernández explicó que el término «charrascas» se refiere a las marcas que los reos se hacen en la piel.
Una práctica que refleja tanto la pertenencia a grupos penitenciarios como las cicatrices emocionales que cargan.
En palabras del cineasta, su obra es una metáfora de la necesidad de detenerse y reflexionar sobre las decisiones que tomamos en la vida.
Este año, el director buscará su segundo Ariel, buscando consolidarse como una figura clave del cine mexicano contemporáneo.
Y seguramente lo logrará al abordar temas sociales con esta sensibilidad única y un enfoque artístico que ha cautivado tanto a la crítica como al público.
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