Guacamaya, la garnacha guanajuatense por excelencia

La famosa y deliciosa guacamaya.
Guacamaya, la garnacha guanajuatense por excelencia

Para quien es amante de las tortas, en algún punto debió probar la famosa guacamaya, una garnacha cuya combinación salada, crujiente, acida y picante de sus ingredientes, hacen la delicia de los guanajuatenses y la vuelven altamente adictiva. 

Este colorido y delicioso platillo puede degustarse en las calles de León y Guanajuato Capital, solo basta con encontrar los triciclos que las venden, muy particulares por llevar una vitrina acondicionada donde se puede apreciar el chicharrón de cerdo, así como una bolsa de bolillos recién horneados y un gran bote de salsa. 

La guacamaya consiste en un bolillo abierto por la mitad, el cual se rellena abundantemente de chicharrón de cerdo -también conocido como duro-; además, se le adereza con pico de gallo, cueritos, aguacate y salsa bien picosa, preferentemente si es preparada con chile de árbol. 

El antojito o garnacha se ha popularizado tanto que, se ha convertido en emblema gastronómico del estado, así como el deleite tanto de visitantes como residentes locales. Se puede comer como botana o entremés, ofrecer en reuniones o fiestas, o simplemente degustar en casa, restaurantes o en puestos callejeros. 

El único problema que tiene la guacamaya es que su autoría se la disputan tanto la ciudad de León como Guanajuato Capital, siendo los primeros quienes incluso visualizan este antojito como algo más que una simple garnacha. 

Origen de la guacamaya 

El origen de la guacamaya apunta al menos a un par de versiones. La primera de ellas, se remonta a 1952 en el local de Don Deme, quien tenía un cliente que compraba chicharrón, bolillo y le agregaba salsa de pico de gallo, acompañado de su tequila.   

Cierta ocasión, aquel cliente después de varios tragos empezó a hablar desmesuradamente, hasta que otro cliente que se encontraba ahí le dijo: “ya cállate que pareces guacamaya”; por lo que, de ahí en adelante don Deme bautizó así al bolillo con chicharrón y pico de gallo. 

Otra versión habla sobre un obrero que le pidió a un vendedor de tortas, le diera un bolillo relleno de duro y salsa; no obstante, al probar el alimento, aquel picante le produjo que se enchilara, entonces empezó a hacer ruidos como las guacamayas, y de ahí que se quedara ese nombre. 

Sin embrago, sea cual sea su verdadero origen la realidad es que nadie se puede resistir a su combinación de sabores, y mucho menos dejar pasar la oportunidad de probar una buena guacamaya si es que se visita el estado de Guanajuato. 

¿Cuáles son sus ingredientes? 

La base de la guacamaya se encuentra en el bolillo, el chicharrón de cerdo y el aguacate, al que hay que sumarle el pico de gallo, preparado con jitomates, cebolla, cilantro y sal al gusto; en tanto, para la salsa se necesita chile de árbol, jitomate, cebolla y ajo; y finalmente, también se le pueden agregar unas gotas de limón. 

Para una buena guacamaya, el bolillo debe ser fresco y estar retacado de chicharrón de cerdo y la salsa roja; asimismo, algunos comensales dicen que las mejores también traen mucho aguacate para que se disfrutes más. 

 

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR:

Gastronomía de Guanajuato, un legado para la cocina mexicana

2 comentarios

Deja un comentario

Noticias Relacionadas

Destacadas

Lo mas comentado

A %d blogueros les gusta esto: